sábado, 23 de junio de 2012

Anoche fui David durante un rato.
Salí de trabajar con la intención de irme a casa plácidamente, pero cuando llevaba un rato apalancado, recibo una llamada de J. (J. es un compañero de trabajo, del que ya os hablaré más adelante).

- ¡Arald! ¿Qué haces?
- Nada, estoy aquí tirado leyendo un rato...
- ¿Leyendo? ¿Un viernes por la noche...?
- Mmm... ¿sí...?
- Tira el libro y nos vemos en media hora en la Plaza del Corso.

Estuvimos de garito en garito mucho rato y entre una cañita por un lado y un porrito por el otro, a J. se le empezaba a ir de las manos. Un billar, dos, tres, una cerveza y unas amigas.

- ¡Ey! ¡Hola!
- ¡Hola! ¿Cómo estáis?
- Blablabla (balbuceos de borrachos)
- Os presento...

Fue ahí cuando, debido al exceso de alcohol y otras sustancias en el interior de J. que me convertí en David.

- X. este es David
- David esta es X.


¿Qué se hace en un momento así?

Solución 1:

X. este es David
David esta es X.
- Mmmm perdona, pero mi nombre es Arald
- Buah tío, perdona es que estoy borracho, blablabla...

Solución 2:

X. este es David
David esta es X.
- Mmmm perdona, pero mi nombre es Arald
- ¿Arald? venga ya David, no me tomes el pelo...

Solución 3:


X. este es David
David esta es X.
- Mmmm perdona, pero mi nombre es Arald
- Entonces, ¿Por qué todo el mundo te llama David?

Así que la solución que tome fue la que encontré más acorde a la situación.

- X. este es David
David esta es X.
- Encantado, soy David, de los David de toda la vida.

La noche fluyó bastante bien, y reconozco que ser David no se me dio nada mal. Sólo le veo una pequeña brecha a esta historia, y es el día en que vuelva a ver a la tal X.

2 comentarios:

  1. Entonces podrás presentarte como Arald, el gemelo perdido de David XD

    ResponderEliminar
  2. Dado los habitual que es dar nombres falsos en noches de juerga, aclarar el malentendido solo habría generado desconfianza y que X creyera que Arald TAMPOCO era tu verdadero nombre. Lo mejor era seguir la corriente y cuando veas a X le dices que se acuerda mal, que a tí esa noche te presentaron como Arald, que es como te llamas desde siempre... Ella, que también llevaría dos copas esa noche supongo, creerá que se acuerda mal, que lo de David se lo ha debido de imaginar... y aquí paz y después gloria ;P

    ResponderEliminar